Diploma de Honor en Gestión de la Innovación realiza charla de proyecto interdisciplinario

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05 / 06 / 2025

Estudiantes del curso “Creatividad y Mentalidad para la Innovación”, parte del programa de Diploma de Honor de la Universidad Diego Portales, a cargo de la académica Paulina Muena, participaron de la exposición “Transformar la mirada: empatía, brechas y creación”, con la participación de la Doctora en Biología Paulina Ossa, quien presentó su proyecto interdisciplinario “Con ojos de Copiapoa”. 

En esta instancia, los y las estudiantes conocieron una propuesta que cruza ciencia, arte y observación crítica. El curso promueve una aproximación interdisciplinaria y empática a la innovación, entendiendo que crear valor no solo implica resolver problemas, sino también comprender a quiénes afectan, cómo se experimentan y desde qué marcos pueden representarse y transformarse. 

“El proyecto ‘Con ojos de Copiapoa’ es un ejemplo concreto de cómo el cruce entre disciplinas —en este caso, biología, arte, poesía y territorio— puede dar lugar a una propuesta innovadora, significativa y profundamente reflexiva. Exponer a los estudiantes a este tipo de trabajos les permite entender que la innovación no solo ocurre en laboratorios o startups, sino también en los bordes, en los márgenes, en lo que muchas veces no se ve. Ese es el tipo de experiencias que encienden preguntas nuevas, despiertan sensibilidad y abren caminos creativos que tal vez no estaban contemplando. Y justamente eso es lo que buscamos provocar desde el Diploma de Honor”, señaló la profesora Muena.

Diego Peñailillo, estudiante de la Escuela de Informática y Telecomunicaciones UDP, destacó el valor creativo de la investigación: “Lo que más me llamó la atención fue cómo la charla rompió con la idea típica de que innovar es solo crear algo tecnológico o súper moderno. Se habló de proteger una especie (las copiapoas) y cómo eso se puede abordar mezclando ciencia, arte, cultura y comunidad. Me hizo mucho sentido, porque yo también creo que innovar no es solo inventar cosas nuevas, sino encontrar formas distintas y más creativas de enfrentar los problemas reales”.

Por su parte, Aranza Marchant, estudiante de Medicina UDP, valoró la posibilidad de tender puentes entre disciplinas aparentemente disímiles: “Lograron armonizar y complementar la ciencia y la poesía, dos áreas que comúnmente se consideran aisladas o incluso incompatibles entre sí, pero que al unirse logran llegar a lo más profundo de cada persona. Una forma muy hermosa de transformar la ciencia en algo más que estadísticas”.